Casa Puerta de Zoco

La gran protagonista sin duda emergió tras la demolición del edificio existente, un lienzo de muralla árabe del S. XII. A partir de este momento todo cambia y el proyecto gira en torno al espacio arqueológico.

Es justo en la esquina en que se encuentra el edificio, donde se situaba la Puerta del Zoco, de dicha puerta toma nombre el nuevo edificio.

La entrada al edificio se realiza por la calle Sagasta, donde una solución técnica mediante pilares en Y buscan el mínimo contacto con la arqueología en el nuevo zaguán. El acceso, deja un paño limpio de vidrio a Calle Santa Teresa para que la ciudad pueda contemplar los restos conservados. Se preserva también una Hornacina de la Virgen preexistente en la fachada.

Cuatro viviendas exclusivas con revestimiento de estuco veneciano y el uso de un patrón en barandillas proveniente de la Lacería del Casino de Murcia, completan un edificio que es prolongación de la cultura y tradición murcianas.